Tras el trágico naufragio de una embarcación el pasado 5 de mayo cerca de Torrey Pines, en San Diego, California, que dejó tres personas muertas y una niña desaparecida, la secretaria de Seguridad Nacional de EE.UU., Kristi Noem, ha solicitado al Departamento de Justicia que se persiga la pena de muerte contra dos ciudadanos mexicanos implicados en el caso.
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Kristi Noem, ha solicitado al Departamento de Justicia que se persiga la pena de muerte contra dos ciudadanos mexicanos
Las autoridades detuvieron a Julio César Zúñiga Luna y Jesús Juan Rodríguez Leyva por su presunta participación en un intento de tráfico de personas que terminó en tragedia.
Según autoridades estadounidenses, al menos 16 migrantes viajaban en una embarcación tipo panga cuando esta volcó. Entre los fallecidos se encuentran un adolescente indio de 14 años y dos adultos mexicanos. Además, una niña india de 10 años continúa desaparecida.
Noem argumentó que la codicia e indiferencia de los contrabandistas causaron directamente la muerte de los migrantes, y subrayó que la Ley de Inmigración y Nacionalidad y la Ley Federal de Pena de Muerte consideran este tipo de delitos como capitales cuando provocan la pérdida de vidas humanas.
Además de los dos mexicanos, las autoridades arrestaron a tres personas más relacionadas con el caso: Melissa Jenelle Cota, Gustavo Lara y Sergio Rojas-Fregoso, este último con antecedentes de deportación previa.
Los detenidos fueron localizados en Chula Vista, donde también fueron encontrados ocho migrantes desaparecidos. La fiscalía informó que el padre del menor fallecido permanece en coma y la madre está hospitalizada.
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